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Las mejores guindillas en vinagre y aceite caseras
Una sabrosa receta de guindillas en vinagre y aceite que es perfecta para amantes del picante y se puede conservar durante un largo periodo de tiempo.
Ingredientes
- 500 g de guindillas frescas
- 750 ml de vinagre de vino blanco
- 250 ml de agua
- 100 ml de aceite de oliva
- 6 dientes de ajo
- 2 hojas de laurel
- sal
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Procedimiento
Primero, lava las guindillas y ponlas a secar sobre un paño de cocina limpio.
En una cazuela alta, vierte el vinagre con el agua y llévalo a ebullición.
Cuando comience a hervir, añade las guindillas, los ajos pelados, las hojas de laurel y la sal.
Deja que todo hierva durante unos 20 minutos.
Una vez pasado ese tiempo, retira las guindillas con una espumadera y colócalas en tarros de conserva esterilizados.
Cubre las guindillas con el líquido de la cocción hasta llenar los tarros y déjalos enfriar.
Una vez frío, agrega el aceite de oliva hasta llenar los tarros por completo. Asegúrate de que todas las guindillas están cubiertas con el aceite.
Cierra los tarros y deja reposar en un lugar fresco y seco durante al menos una semana antes de consumir.
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Las mejores guindillas en vinagre y aceite caseras
Una sabrosa receta de guindillas en vinagre y aceite que es perfecta para amantes del picante y se puede conservar durante un largo periodo de tiempo.
Primero, lava las guindillas y ponlas a secar sobre un paño de cocina limpio.
En una cazuela alta, vierte el vinagre con el agua y llévalo a ebullición.
Cuando comience a hervir, añade las guindillas, los ajos pelados, las hojas de laurel y la sal.
Deja que todo hierva durante unos 20 minutos.
Una vez pasado ese tiempo, retira las guindillas con una espumadera y colócalas en tarros de conserva esterilizados.
Cubre las guindillas con el líquido de la cocción hasta llenar los tarros y déjalos enfriar.
Una vez frío, agrega el aceite de oliva hasta llenar los tarros por completo. Asegúrate de que todas las guindillas están cubiertas con el aceite.
Cierra los tarros y deja reposar en un lugar fresco y seco durante al menos una semana antes de consumir.
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