Fuente: Pixabay: Alexei_other
Pierna de cerdo adobada para Navidad
Esta es una receta que he preparado por años, cada Navidad, para disfrutar con mi familia. La pierna de cerdo adobada siempre es la estrella de la cena. El secreto está en la mezcla de especias, vino y las horas de marinado que hacen que sea suave y deliciosa. Además, durante su cocción lentamente en el horno, llena la casa con un aroma irresistible.
Ingredientes
- 1 pierna de cerdo de 5 kilogramos
- 2 cabezas de ajo
- 1 taza de vinagre de manzana
- 1 botella de vino blanco seco
- 2 naranjas (el jugo)
- 1 cdta de comino molido
- 1 cdta de orégano seco
- Sal y pimienta negra al gusto
- 2 hojas de laurel
- 1 taza de aceite de oliva
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Procedimiento
Comienza con la preparación del adobo, mezclando en la licuadora los ajos pelados, el vinagre, la mitad del vino blanco, el jugo de naranja, el comino, orégano, sal y pimienta. Siempre pruebo este adobo antes de marinar la carne para asegurarme de que tiene suficiente sazón.
Con un cuchillo bien afilado, realiza cortes en la pierna de cerdo para que el adobo penetre mejor. Luego cubre la pierna con la mezcla, asegurándote de que entre bien en los cortes que hiciste. Aquí te recomiendo usar guantes para evitar el olor fuerte en las manos.
Deja marinar la pierna de cerdo en el refrigerador durante 24 horas. Este paso es crucial para que la carne tome todo el sabor del adobo y quede jugosa.
Al día siguiente, precalienta el horno a 180°C (350°F). Retira la pierna de cerdo del adobo y colócala en una bandeja para hornear. Agrega las hojas de laurel y vierte el resto del vino blanco y el aceite de oliva sobre la pierna. Mi consejo es rociarla cada 30 minutos con sus propios jugos para evitar que se seque.
Hornea durante 3 horas, o hasta que la carne esté dorada y bien cocida. Para saber si está lista, puedes utilizar un termómetro de cocina. La temperatura interna debe ser de al menos 70°C (160°F).
Deja reposar la pierna antes de cortarla. Esto hará que los jugos se redistribuyan y la carne estará más tierna y jugosa. Te aseguro que el resultado vale la pena, una pierna de cerdo dorada por fuera, tierna y jugosa por dentro con un sabor inigualable.